Enrique Guzmán comenzó su carrera a fines de los años cincuenta como cantante del grupo adolescente los Teen Tops, adaptando al español éxitos de artistas como Elvis Presley o Little Richard. Poco después se lanzó como solista, convirtiéndose en un ídolo juvenil en América Latina al estilo de Bobby Darin. Durante las siguientes dos décadas Guzmán grabó numerosos discos, protagonizó decenas de películas y trabajó como conductor televisivo, además de sostener publicitados romances con Angélica María, Rocío Dúrcal y Silvia Pinal. Con está ultima tendría a su hija Alejandra, a quién Guzmán ayudaría a volverse una famosa cantante. En el nuevo milenio fue jurado de concursos televisivos y en 2017 celebró 60 años de carrera con un concierto en el Auditorio Nacional.