El álbum debut de estos puertorriqueños, no sólo causó un extenso furor en toda la escena musical latinoamericana; estos hermanos de sangre y corazón, también lograron plantarse en el mapa del rap en español. Lejos de una clasificación simplista de su música, el lirismo de Residente y las composiciones de Visitante dan como resultado una mezcla explosiva que sorprende con rimas imaginativas o tragicómicas, pero sin dejar de lado la exuberancia rítmica que se encuentra en las calles boricuas.