Sin duda el compositor de musicales más famoso e influyente de su generación, el británico Andrew Lloyd Webber estableció su lugar entre las grandes estrellas de Broadway y del West End a comienzos de los setenta con Jesucristo Superstar. Conocido por el carácter majestuoso e imponente de sus composiciones y por haber introducido el rock and roll en el ámbito del teatro musical, entre sus numerosas obras también figuran sucesos mundiales como Evita, Cats y El fantasma de la Ópera. Estrenada en 1988 en Nueva York, esta última se convertiría en el musical de mayor tiempo en cartel de la historia de Broadway.