A menudo considerado como el padrino de la EDM, Tiësto se convirtió a comienzos del milenio en el modelo de lo que hoy entendemos por un DJ. Nacido como Tijs Michiel Verwest en la ciudad neerlandesa de Breda en 1969, sus primeros pasos fueron pinchando el new beat y el house que por entonces dominaban el circuito centroeuropeo. A mediados de los 90, ya había dado el salto al trance, y las hipnóticas melodías sobre ritmos beats rotundos de Magik One (First Flight) (1997) se convirtieron en referencias esenciales del género. La remezcla de “Silence”, un tema del dúo ambient Delerium que reinventó con la voz de Sarah McLachlan en 2000, lo catapultó al mainstream y a escenarios tan monumentales como el del Estadio Olímpico de Atenas en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de 2004. Con Kaleidoscope (2009), Tiësto comenzó a dejar atrás las atmósferas envolventes del trance para explorar el ritmo enérgico y las melodías pop del dance electrónico que tomó los clubes en la década siguiente. En The London Sessions (2020) se reunió con algunas de las mejores voces de la escena británica, y el refulgente DRIVE de 2023 lo captura en plena efervescencia creativa junto a colaboradoras como Ava Max o KAROL G.