En la gira de presentación de “For Those About to Rock / We Salute You” AC/DC adoptó la costumbre de cerrar sus conciertos con artillería pesada, en sentido tanto figurado como literal. En una carrera abundante en declaraciones directas, “a los que van a rockerar / os saludamos” va un paso más allá: los nuevos dioses del rock abrazan a los creyentes. En su segundo disco con Brian Johnson se alejan aún más de las raíces blues para meterse de cabeza en el hard rock. Los estilizados riffs de “I Put the Finger On You” y “Let's Get it Up” parecen creados para el estadio, el lugar ideal para esos estribillos que suenan a cántico futbolero.