Descendiente de las dinastías Habsburgo y hugonote, Nikolaus Harnoncourt (Berlín, 1929) fue un pionero de las interpretaciones historicistas y uno de sus primeros exponentes en dirigir repertorio sinfónico y operístico convencional. En 1953, siendo violonchelista de la Orquesta Sinfónica de Viena, fundó el Concertus Musicas Wein (CMW) para interpretar música barroca con los instrumentos de la época. El conjunto hizo su debut discográfico con Purcell e inicialmente se concentró en el siglo XVII. A lo largo de los años 70 y 80, Harnoncourt y la CMW participaron en un proyecto con Gustav Leonhardt para grabar todas las cantatas y obras corales a gran escala de Bach. En esta época, Harnoncourt se dedicó a dirigir orquestas como invitado, estableciendo sólidas relaciones con la Orquesta Real del Concertgebouw, la Filarmónica de Viena y la Orquesta de Cámara de Europa, con las que defendió su idea de dar importancia histórica a los instrumentos modernos. Su catálogo pronto incluyó a Beethoven y se centró en los últimos años del siglo XIX con Brahms y Bruckner. A la vez, exploró música poco valorada, como las óperas de Haydn, y se adentró en los estilos más ligeros de Offenbach y los Strauss vieneses. Su forma de hacer música se caracteriza por una visión singular, una determinación para romper con la tradición y un enfoque a menudo individual del ritmo. Su grabación de 2009, Gershwin: Porgy & Bess, se balancea de una manera en la que sólo él podía hacerlo. Harnoncourt se retiró oficialmente en diciembre de 2015, a tan sólo tres meses de su muerte.