Paavo Järvi, nacido en 1962, es un embajador de la música escandinava y la de su natal Estonia, además de un director célebre por su amplia experiencia y gustos variados. Hijo del también director Neeme Järvi, en su juventud estudió percusión y dirección orquestal en el sistema educativo soviético. En los años 80 su familia migró a Estados Unidos y Paavo continuó su formación en Juilliard y el Curtis Institute of Music. Durante la década siguiente se convirtió en director residente de la Orquesta Sinfónica de Malmö y trabajó por periodos en conjuntos de Estocolmo y Birmingham. Su despegue profesional llegó al ser nombrado director de la Sinfónica de Cincinnati. Le seguiría una década de reconocimientos por sus interpretaciones de los repertorios de Sibelius, Stravinsky, Shostakovich y sus compatriotas Arvo Pärt, Erkki-Sven Tüür y Eduard Tubin. Paavo Järvi ha participado con otras orquestas en Bremen, París y Tokio, manteniendo siempre un estilo incisivo y elegante, sin perder sobriedad en el podio. Y al igual que su padre, se ha caracterizado por la extensión de su obra grabada, que incluye su periodo como director musical de la Tonhalle Orchester de Zúrich desde 2019.